Juego con Plumas
Hace un par de fines de semana, tuve que pasar un sábado y
domingo solo y bastante aislado en una casa de campo familiar, reemplazando a los caseros, que debían tomarse esos dos días.
Alguien debía cuidar la propiedad, y yo era el único disponible en la familia. Prometían ser dos días aburridos, pues el tiempo estaba frío
y lluvioso, y el pronóstico anunciaba que no cambiaría, como finalmente sucedió, excepto
por unos breves momentos. Por lo tanto sabía que debería permanecer dentro de
la casa, sin poder disfrutar del aire libre, o de un paseo por los alrededores.
Ante este panorama, cargué mis cosas en mi automóvil para
dirigirme hacia el campo, y entre mis cosas incluí una variada selección de
plumas que abarcaba algunas que hacía cierto tiempo que no utilizaba, y otras
que habían llegado hace poco y aún no había probado, junto con tres o cuatro
tinteros con mis marcas y colores favoritos, que coloqué en una pequeña maleta,
junto con mi cámara, algunas revistas y un libro, dado que tampoco tendría
acceso a internet allí.
Así las cosas, aproveché esos dos días probando todas esas
plumas, y tomando algunas fotografías, entre ellas, las de las Nakayas, al aire
libre, que incluí en mi post titulado "Nakaya Fever", durante un breve momento en
que el tiempo dio una corta tregua, y hasta permitió que el sol se asomara tímidamente
entre las nubes.
Las revistas, el libro, y especialmente las plumas, hicieron
que mi tiempo volara casi sin darme cuenta, y que el día siguiente y el momento
del regreso llegara más rápidamente.
Al
prepararme para regresar a mi hogar, llevaba conmigo una buena cantidad de
fotos y pruebas sobre papel, algunas de las cuales me permito compartir con
vosotros aquí.
Waterman Número 7, vintage, ebonita ripple red, con plumín
número 7, muy flexible.
Wahl Eversharp marmolada. Una pluma vintage muy deliciosa y gratificante
a la hora de escribir con ella.
Namiki Falcon, con plumín modificado por John Mottishaw a
round oblique extra flex.
Pilot Custom Grandee, con cuerpo y capuchón de madera, y un
maravilloso plumín muy flexible.
Mi vieja y fiel Conklin Symetrik que ya he presentado alguna
vez aquí.
Llevé y probé también mis cuatro nuevas Nakaya, que he
mostrado en el hilo aludido, al igual que algunas Pelikan, y unas
estilográficas japonesas que ya mostraré oportunamente.
Finalmente, debo decir que, a pesar de todo, disfruté mucho de ese fin de
semana de aislamiento, con mi actividad de lectura y escritura, gracias a estas
fantásticas compañeras.
Espero que os gusten estas plumas y la forma que escriben!!
Un muy cordial saludo, Dr, D.
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